Las escuelas asociadas a la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas (UNESCO) desarrollan el proyecto internacional “Por la Ruta del esclavo”. Los estudiantes de la Secundaria Básica “Camilo Torres Restrepo” de Bauta desandan este camino donde encontraron sangre y lágrimas pero también una rica herencia cultural.
La profesora Yuneibis Morales Valdés coordinadora de la (UNESCO) en el centro nos comentó de los descubrimientos que han hecho hurgando en la historia con la colaboración de investigadores y los descendientes de esclavos africanos que viven en Bauta.
Yuneibis Morales : Este proyecto vio la luz el 3 de mayo de 1994. Desde esa fecha son muchos los que se han apasionado por él y han aportado de su tiempo y su talento tras las huellas de nuestros abuelos negros.
El objetivo primordial es el rescate y preservación de valores históricos que forman parte del patrimonio local y fortalecen la cultura y el sentido de pertenencia e identidad en nuestros estudiantes.
"Por la ruta del esclavo” se basa en la búsqueda de información sobre las duras consecuencias de la esclavitud; el folklore, las costumbres, cultura, raíces afrocubanas, tradiciones que existieron en nuestro municipio y, a la vez permite divulgar este proceso sincrético por el mundo, mediante un encuentro internacional, donde cada país expone su criterio en torno al tema.
Nuestros estudiantes desarrollan trabajos de investigación en los que estudian acerca los asentamientos de esclavos en nuestro municipio; el ingenio “Tahoro”, las ruinas de “El Cafetal” y la calle de los congos dentro del casco urbano. Allí los chicos construyeron el “Parque del Congo Libre” donde se levanta una escultura que representa un esclavo rompiendo las cadenas, es una obra del artista de la localidad Rael Rodríguez Capote con la colaboración de los niños.
Después de 15 años de andar “Por la Ruta del esclavo” el proyecto se diversifica y adquiere nuevas dimensiones. Hoy cuentan con el grupo de danza folklórica “Amanecer” integrado por estudiantes de séptimo grado que bailan los ritmos afrocubanos. Leyanis Pérez Hernández, describió su experiencia:
Leyanis Pérez: Son bailes muy alegres y expresivos, los disfrutamos mucho porque los llevamos en la sangre. Aprendimos que de esta misma forma bailaban los esclavos en las noches para olvidar las duras jornadas en los cañaverales, los maltratos y las injusticias a que eran sometidos. Esta era la forma que encontraron para no olvidar su querida tierra africana. Podemos decir con orgullo, porque así lo experimentamos, que todos los bailes cubanos de hoy llevan en su ritmo una marcada influencia de aquellos bailes de nuestros ancestros esclavos.
La instructora de arte Bárbara Yailín Martínez Mesa se enamoró a primera vista del proyecto. Ella es la coreógrafa del grupo de danza “Amanecer” y la promotora del programa “Raíces Nuestras”, una vereda nueva que se extiende en el ir y venir “Por la Ruta del Esclavo”:
Bárbara Yailín Martínez: “Raíces Nuestras” comenzó con el grupo de danza “Amanecer”. No nos conformamos con crear una coreografía y lograr que los niños la repitieran de la forma más perfecta, nos sentimos en el compromiso de enseñarle acerca de nuestras raíces culturales más autóctonas. Que cuando bailen conozcan como surgió esa música, qué representan los movimientos los gestos y las figuras, en que momento de nuestra historia fue concebida y lo que simboliza para el pueblo cubano. Ahora tenemos una vez al mes un programa de presentaciones al que se suman artistas del territorio que tratan el tema afrocubano, historiadores, descendientes de esclavos que comparten leyendas que fueron atesorando de una generación a otra.
La ruta del esclavo ya no es el pequeño camino que comenzaron los estudiantes de la “Camilo Torres Restrepo” asociados a la UNESCO, muchos se han sumado a este peregrinaje que ya se pierde en el horizonte de la historia en busca de una rica herencia que nos dejaron nuestros pobres abuelos negros: un tesoro incalculable de cultura y tradiciones.